La factura rectificativa, conocida comúnmente como nota de abono o factura de abono, es un tipo de factura utilizada para corregir algún error de la factura original o agregar más datos necesarios.
En este post explicaremos en qué consisten, cuándo se emiten y algunos de los tipos con los que nos podemos encontrar.
¿Qué es una nota de abono?
Se trata de un documento donde se detallan una serie de correcciones en la factura ordinaria o con la devolución de la mercancía.
La nota de abono es una factura de venta negativa, y se emite cuando la factura original no cumple con los requisitos de la ley vigente, pero también cuando se produce algún tipo de error con la mercancía (precio, devoluciones, descuentos…).
También puede ser de signo positivo si se ha emitido por error o faltan datos respecto a la factura original.
En la práctica contable se registrará con su nombre técnico: factura rectificativa (nombrada así desde el nuevo Reglamento de Facturación de 2013).
En la siguiente imagen mostramos un modelo sencillo de nota de abono:
¿Cuándo se debe emitir?
Según el artículo 15 del actual reglamento, una nota de abono debe emitirse cuando:
1. La factura original no cumple los requisitos obligatorios (artículos 6 y 7). En caso contrario, no es una factura rectificativa.
2. Las cuotas se han repercutido de forma incorrecta (artículo 89 de la Ley del IVA).
3. Los hechos dan lugar a que haya una modificación de la base imponible (artículo 80 de laLey del IVA).
4. Los requisitos son válidos.
¿Qué tipos de nota de abono existen?
Aquí explicamos los más importantes:
1. El riesgo de la factura rectificativa negativa
La emisión de estas facturas de abonos que anulan la original tienen una serie de riesgos: cuando se presentan ante la Agencia Tributaria, suele rechazarlas, ya que es complicado justificar esa anulación (sobre todo si es en prestación de servicios).
2. Factura rectificativa para recuperar el IVA de los impagados
Se utilizan para recuperar el IVA en aquellas facturas que tenga impagadas, con los siguientes requisitos:
· Base imponible = 0
· IVA repercutido = IVA a recuperar (con signo negativo)
· Total de la factura = Total de IVA a recuperar (con signo negativo)
Y además de eso, habrá que especificar en la factura su fórmula correspondiente y la anulación de la cuota del IVA. De esa forma, Hacienda asumirá esa recuperación del IVA devengado cuando se cumplan los requisitos y haya pasado un año del impuesto devengado. Hay que recordar que en caso de pymes y autónomos el plazo es de 6 meses.
También hay que tener en cuenta que desde 2014 esta notificación y toda la documentación se deben enviar a través de un formulario disponible en la página web de AEAT .
Conclusiones
Así pues, de forma resumida podemos decir que, si queremos realizar una nota de abono o factura rectificativa, debemos especificar explícitamente que se trata de una factura rectificativa, además de a qué factura hace referencia, el tipo impositivo, la cuota repercutida y su numeración específica.
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